Sirvan estas líneas para agradecer públicamente, lo que me está aportando esta bella persona en mi caminar, que a base de nuestras sincronicidades y la ayuda de la oración y las peticiones por ambos, han hecho que mis ángeles y sus imágenes de devoción hayan hecho que nuestros caminos converjan, y que nos quedamos perplejo en nuestras conversaciones la cantidad de cosas que nos unen.
Y gracias a la actuación de una persona común a Rocío y a mí, gracias Patricia por llegar a conocerme tan bien sin apenas tener mucho contacto conmigo, que has abierto una puerta para que dos almas se puedan conocer. Y como bien díce el refrán "quien algo quiere algo le cuesta", el esfuerzo a merecido la pena.
En la vida ocurren cosas que no comprendemos, pero que nos hace sentir bien, y gracias a Rocio, quien lo diría ahora ese nombre se me hace más cercano y emotivo al pronunciarlo en mi boca; nombre muy cercano desde mi infancia, cuando de pequeño he visitado a la Reina de las Marismas en su pequeña ermita de Almonte y que se encuentra en la tierra que me vió nacer.
Quiero y deseo promulgarlo a los cuatro vientos, que paso por uno momentos muy bellos y bonitos viviéndolos al lado de una mujer, que disfruta como yo, de los paseos al lado del mar, de una puesta de sol o de contemplar absortos la luna llena. Luna que tantas veces he contemplado en mis paseos junto al mar y que ha sabido de mis inquietudes, anhelos y alegrías.
Pero sobre todo por volver a recuperar el espíritu de aprendiz, en esforzarme en fijarme en pequeños detalles, en sentir cosas especiales al lado de Rocio, a saber pedir perdón por los fallos que puedo cometer en la forma mía de actuar y en verse correspondido con una bella sonrisa o con un apretón de manos, como señal de aprobación de que he aprendido de mi fallo.
O de aprender a reconocer mis limitaciones y decírselo abiertamente para que no haya malentendidos en la forma de actuar, y que con una simple mirada sepa lo que le quiero transmitir.
Gracias por saber comprenderme y por animarme en esos momentos en que el estrés me hace mella.
Gracias por acariciar mi alma y por sacar lo mejor de mí, haciéndome evolucionar como persona.
Gracías a mis ángeles, por poner en mi camino de evolución personal a Rocio que tanto me aporta y que tanto aprendo de ella, lo he leído en varios libros sobre ángeles, y al leerlo disfrutaba mucho de como han hecho los ángeles conocer a personas y han creado historias de amor muy bellas, y ya ves ahora la estoy viviendo yo de manera plena, gracias Arcángel Anael.
Gracías Rocío cuando al despedirme de tí me permites poder contemplar la bella bahía de Málaga al regresar de tu bello pueblecito, y disfrutar de las luces tintineantes de la ciudad y de ese faro que te muestra la luz, para que no pierdas el camino que te lleva a un buen puerto.
Dar las gracias me hace sentir bien y estas palabras salen de lo mejor de mí, mi corazón. Y es de bien nacido ser agradecido y aquí dejo este escrito para Rocio, pero que podéis disfrutar todos, por que las cosas bonitas se deben compartir con todos, para manifestar que aun quedan personas que son felices y lo demuestran a los demás, por que hay almas tristes en este mundo, que se empeñan que las cosas bonitas no salgan a la luz.
Y cierro este escrito con una frase que nos gusta a los dos "LA VIIIIIIDA".
-Alma Feliz, Libre, Bonita y Grande-
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