Hoy se me viene a la cabeza una frase: "Siembra AMOR, cultiva AMOR y no te faltará cosecha". Ayer sábado cuando tras cursar una visita a nuestras Hermanitas de la Cruz nos hicieron sentir a Rocío y a mí muy felices por contar con el Amor y el cariño de nuestra hermana Carmen, la cual llegó a nuestras vidas de la forma más inesperada.
Siempre he sentido un cariño muy especial por estas Hermanas. Mi vinculación viene cuando de la mano de mi gran amigo José Luís Caro, me enseñó ese lugar mágico y cargado de energía especial sito en la calle Imágen de la ciudad hermana de Sevilla, y que desde ese día siempre que paso por Sevilla mi alma necesita dar gracias a Santa Ángela por todo lo que me ha hecho vivir.
Tras cruzar el umbral de la puerta y tocar la campana de su puerta, se entra en un mundo especial, cargado de sensaciones que hacen a tu alma elevarse y sentirse especialmente bien. La hermanita que abre la puerta te recibe con una carita angelical y en su cara se observa una sonrisa que te llega al corazón.
Entramos a un mundo especial, donde el color blanco de la cal hace que nos encontramos en la misma puerta del cielo. Tras pasar el umbral nos dirigimos a la Capilla donde reposan los restos de Santa Ángela, haciendonos sentir muy felices y eleva nuestras almas a estados nunca sentido antes.
Tras describiros un poco mi cariño hacía estas hermanas, os comento como estas monjitas me han hecho apreciarlas aún más.
En las navidades del año pasado, tenía interés en asistir a la misa del gallo que realizan estas hermanas, pero cual fué mi desilusión que la habían celebrado a las 22,00 horas y yo pensaba que era a las 00,00 horas.
En otra ocasión intenté visitar su belén pero no pudo ser. Total que parecía que no estaba en mi camino que pudiera visitar este convento o quizás mis ángeles querían depararme algo especial, algo más intimo, algo que fuera inolvidable.
El 12 de Septiembre conocí a mi mujer, y a su lugar de trabajo llegaban dos hermanitas de la Cruz para pedir un donativo para su Convento, conversando con ellas Rocío fue entablando una amistad con la hermana Carmen. La Hermana Carmen nos dijo que en Sevilla se producía la apertura del columbario de la Madre María de la Purísima, que se encuentra en proceso de beatificación.
Las coincidencias del destino hicieron que esta hermanita y nosotros la pudieramos conocer un poco más.
Van pasando los días y fijamos el día de nuestra boda, le comunicamos esta buena noticia a la hermana Carmen y nos dice que le haría mucha ilusión contar con nuestra visita en su Convento. Aceptamos la invitación y el mismo día que nos casamos cursamos visita a las Hermanitas de la Cruz, para hacerles entrega de un ramo de flores.
Cuando ya regresamos de nuestro viaje de Bodas y pudimos centrarnos un poco en nuestro día a día, decidió Rocío hacerles unas tartas y llevárselas al convento en señal de agradecimiento por el detalle que tuvieron con nosotros el día de nuestra boda cuando nos cantaron una oración con aire rociero.
Rocío se encontró con la Hermana Carmen y le dijo que teníamos un detallito para ella y para sus Hermanas, pero cual fue nuestra sorpresa que la hermana Carmen y todas sus Hermanas tenían para nosotros un regalo.
Que ilusión nos hizo este bello gesto, que feliz nos ha hecho a Rocío y a mí recibir de estas hermanas un regalo con tanta carga especial y que nos hizo estremecer.
El sábado por la tarde, fuimos al Convento y tras escuchar su oración final, con sus voces tan angelicales, nos reciben la hermana Carmen y la Madre Superiora, les hacemos entrega de las dos tartas y la Madre Superiora autoriza a la Madre Carmen de hacernos entrega de una Cruz de Caravaca con reliquias de Santa Ángela de la Cruz y de diversas vírgenes sevillanas.
Nuestras almas se estremecieron y no teníamos palabra de agradecimientos por tan bello gesto. Teniendo en nuestra casa un lugar preferente para este bello regalo, donde nos recuerde al mirarla este día especial y el agradecer el gesto que han tenido las Hermanas de Cruz hacía nosotros.
Gracias, gracias, y gracias a las hermanitas de la Cruz de Málaga, siempre os llevaremos en nuestro corazón, y deseamos que esta Cruz nos ilumine y nos haga llegar a nuestras vidas cosas bellas y especiales.
Gracias hermana Camen, por ese don que Dios te ha dado, gracias por tu cariño, gracias por tu forma de entender la vida, y pedimos a nuestros ángeles que te iluminen en tu caminar y te den fuerzas para afrontar cada nuevo día.
-Alma Feliz, Libre, Bonita, Grande y Enamorada -
